viernes, 5 de febrero de 2010

LA OBRA MAESTRA DE NOLAN


Cuando hablamos de El Caballero Oscuro nos estamos refiriendo a una de las mejores películas de los últimos años. Christopher Nolan dirige la secuela de Batman Begins de una manera tan magistral que incluso supera a su notable predecesora. Así pues, El Caballero Oscuro se trata de la mejor película de Batman y quizás, de la mejor adaptación de un cómic que se halla rodado jamás.

Christian Bale es sin duda alguna el mejor y más humano de todos los Batman. El guión escrito por el propio Nolan y por su hermano Jonathan nos regala a un protagonista sumergido en las dudas y en el sentimiento de culpa. Junto con Batman Begins, es la única película que de verdad toma en serio la psicología del personaje protagonista, desaprovechado por completo en los films de Burton, que prestaba más atención al villano, y en los de Joel Schumacher, donde la historia y los personajes eran simples e infantiles. El Joker, interpretado magistralmente por el fallecido Heath Ledger, es el alma de la película. Manipula y juega con todo el mundo para sembrar el caos y la anarquía en la ciudad de Gotham. El Joker de Ledger es muy diferente de aquel al que interpretara Jack Nicholson en 1989. La psicología del personaje la explica el personaje de Alfred (Michael Caine) cuando dice que hay personas desquiciadas que lo único que quieren es ver arder el mundo. Nolan lo plasma a la perfección al no contar en ningún momento el verdadero origen de las cicatrices del Joker, ya que explicar eso sería justificar la locura del personaje, y ello, al igual que sus acciones, no tienen ningún tipo de justificación. Por otra parte, el Joker tan sólo aparece sin maquillaje en una escena (en un solo plano, para ser más exactos) lo que indica que no es un criminal chiflado que se disfraza de payaso, sino que él es siempre el Joker, y cuando se quita el maquillaje lo hace para disfrazarse. Sin duda, tanto por su compleja psicología como por la espléndida actuación de Ledger, este Joker se coloca entre los criminales más peligrosos y terroríficos del cine. El tercero de los protagonistas es Aaron Eckhart, que encarna al fiscal del distrito Harvey Dent. Tampoco se puede pasar por alto al gran Gary Oldman como el comisario James Gordon, ni olvidar al resto del reparto, que se completa con Morgan Freeman como Lucious Fox, Michael Caine como Alfred y Maggie Gylleghaard como Rachel Dowes.

La historia, comienza justo donde termina Batman Begins y hace gala de unos planteamientos filosóficos que el director ya puso en marcha en ella. Frases como “es el héroe que Gotham se merece pero no el que necesita en este momento” muestran las intenciones del film. Bruce Wayne mantuvo una lucha contra el crimen en la primera entrega para convertirse en un símbolo y servir de ejemplo a los ciudadanos, en la nueva entrega la lucha más importante se libra en su interior, hasta el punto de averiguar si es Gotham quién necesita al murciélago o si es él mismo quién de verdad lo necesita. Reflexiones acerca de si se puede justificar tomarse la justicia por su mano o reflexiones acerca del terror y la corrupción son el marco en el que se desarrolla la película. Por otra parte, el enfrentamiento en la calle entre Batman y el Joker es de los momentos más intensos de la película, así como su cara a cara en la comisaría. El ritmo del montaje es frenético y, en ciertos momentos transmite la sensación de angustia que los personajes viven tras la pantalla. Señalar además que el ritmo del montaje hace que se pasen por alto algunos detalles que se perciben tras un segundo o tercer visionado del film, tales como un palabra o un simple gesto. Mención aparte merece el final. Un final espléndido, magistral, muy acorde con el estilo de la película. Simplemente genial.

Mucho se ha dicho sobre esta película. La mayor parte son buenas. Pese a ello también tiene sus detractores, que afirman que el éxito ha venido a causa del fallecimiento de Heath Ledger y que el tiempo pondrá a la película en su lugar. Yo pienso que la película ha alcanzado el éxito (se encuentra entre las cinco películas más taquilleras de la historia) por méritos propios y sí, el tiempo pondrá esta película en su lugar, ya que creo que es una película que se adelanta a su tiempo y que aún no le han sido reconocidos todos los valores y méritos que tiene.


DRAGONBALL EVOLUTION: LA MAYOR DECEPCIÓN CINEMATOGRÁFICA DE LA HISTORIA


Si digo que casi me sangran las retinas al ver esta película me quedo corto. Si como adaptación de cómic vale poco, como película aún menos. Nos encontramos frente a una película que sólo toma los nombres de los personajes del mítico manga para enmarcarlos en una historia que poco tiene que ver con la serie de la que muchos disfrutábamos cuando éramos pequeños. El culpable de que esto sea así se llama James Wong, director y guionista de la cinta. Obviamente el director de Destino Final y El Único no era el indicado para llevar a la gran pantalla las andanzas de Goku y compañía. Además era necesario que el director estuviese familiarizado con la obra de Toriyama para que se hiciese una adaptación decente. Nada de ello. Él mismo afirmó que no conocía Dragon Ball hasta que le encargaron hacer la película, y eso se nota. Wong no sabe ser fiel a la esencia de los personajes ni al espíritu del manga.

Justin Chadwin (el hijo de Tom Cruise en La Guerra de los Mundos) interpreta a Goku. El guión presenta al saiyan como un adolescente hormonado más preocupado por ligar con chicas que por practicar artes marciales. Grave error ya que para Goku lo más importante era superarse a sí mismo en las artes marciales y luchar contra adversarios más fuertes que él para mejorar. Emmy Rossum es Bulma, una niña pija y malcriada que buscaba las bolas de Dragón para conseguir novio. Sin embargo, en la película es una especie de Lara Croft con un mechón de pelo azul. Mutenroshi era un viejo pervertido experto en artes marciales, calvo, con barba blanca, gafas de sol y caparazón de tortuga. Lo interpreta Chow Yun-Fat. Clavadito, ¿eh? Por cierto, que yo recuerde el maestro de Mutenroshi se llamba Mutaito y tenía rasgos japoneses, ¿a qué viene entonces poner a Ernie Hudson y llamarlo Sifu-Norris? ¿Acaso es familia de Chuck Norris y derrotó en el pasado a Piccolo con una patada giratoria? Aunque sin duda el peor de todos es Ray Park como Yamsha. En la historia original Yamsha era un asaltante de caminos y practicante de artes marciales que se enfrentó a Goku en varias ocasiones. Aquí es un vulgar ratero que se pasa de gracioso y crea el más absoluto rechazo por el espectador. Un personaje totalmente innecesario.

El manga narra la historia de Son Goku, un chico que vive solo en las montañas y que aprendió artes marciales de su abuelo. Son Goku comienza a viajar por el mundo para buscar las bolas mágicas y a la vez perfeccionar su entrenamiento. Un buen día, tras participar en un par de torneos de artes marciales y derrotar a un ejército completo, alguien rompe el sello que mantenía encerrado a Piccolo, el Rey de los demonios. Su vuelta a la vida es el preludio de que la Tierra se verá envuelta en la más profunda oscuridad. La película cuenta la historia de Goku, un estudiante de instituto, marginado por todos los demás chicos y enamorado en secreto de Chichi, la chica más popular su clase. Su abuelo le enseña artes marciales pero él prefiere ligar con chicas. El día en que Goku cumple 18 años Chichi le invita a una fiesta que da en su castillo, hasta que aparece Piccolo para fastidiar la fiesta (nunca mejor dicho) y dominar el mundo.

Por otra parte se ha ignorado por completo toda la mitología de Dragon Ball. Aquí Piccolo es un simple monstruo que quiere destrozar el mundo (qué mala leche, ¿verdad?). En la historia original, el dios protector de la Tierra se había desdoblado en dos personas, una de ellas era la parte buena, Kami- Sama, que se convirtió en el Dios de la Tierra y creó las siete esferas del Dragón. La parte mala, se manifestó en Piccolo, el Rey de los diablos, que en el pasado trató de sumir el planeta en el más oscuro de los infiernos. Si uno de ellos moría, también lo hacía el otro ya que se trataba de la misma persona. De igual manera, las bolas de dragón también desaparecían. Así quedaba reflejada la dualidad entre el bien y el mal. Todo esto se obvia en el film. Otra referencia importante es el libro de Viaje a Occidente, donde se narra la leyenda del Rey Mono. El personaje de Goku se inspiraba en este personaje y en el Jackie Chan de sus films de kung-fu de los 70. De hecho películas como La Serpiente a la Sombra del Águila o El Mono Borracho en el Ojo del Tigre son homenajeadas en el manga. No hubiese venido mal que el director hubiese visto alguna de ellas para inspirarse. ¿Todo esto podría pasarse por alto si al menos disfrutásemos de unas luchas bien coreografiadas e intensas? Nunca lo sabremos porque los dos o tres combates que hay a lo largo del film resultan ser breves y poco emocionantes que desembocan en un penoso duelo final entre Goku y Piccolo.

En definitiva, podría haberse tratado del inicio de una nueva saga de películas, repleta de mitología y artes marciales, pero se fue al traste por un escasísimo presupuesto y el director equivocado. Para aquel que piense que esta era la única manera posible de adaptar la historia con personajes de carne y hueso, que visione la película Dragon Ball. Comienza la Magia, una película japonesa de 1989 que adaptaba al cine por primera vez las aventuras de Goku. La película no es gran cosa, pero sí es más fiel a la historia original (aparece el bastón mágico, la nube Kinton, etc). El guión de esta producción se inspira en la primera película de animación de Dragon Ball, La Leyenda del Dragón Shenron.

Para terminar, lanzo una pregunta al lector, ¿a qué viene el “Evolution” del título? ¿Quién evoluciona a lo largo de esta película? Aunque pensándolo bien, ¿qué tiene de Dragon Ball esta película? Si la hubiesen llamado tan sólo “Evolution” y hubiesen cambiado los nombres de los personajes se hubiesen ahorrado pagar derechos de autor, porque desde luego, con lo que han cambiado la historia nadie podría acusarles de plagio.